Geandy Pavón


Ahora cuando estaba a punto de publicar esta entrevista con Geandy Pavón me di cuenta que no había hecho una presentación como es la costumbre en La Manigua. Y me puse a pensar, ¿será que hace falta? Llegué a la conclusion de que sería un intento fallido. Un hombre de la trayectoria, la humanidad, la integridad de Geandy no necesita presentaciones. Así que en vez de aburrirlos, los dejo para que lean esta joya de entrevista. 


Instagram , Exhibit 40 Days & 40 Nights


La Manigua: Hola Geandy. Bienvenido a La Manigua. Cuéntame un poco de ti: ¿dónde naces, cómo fue tu infancia y cómo llegaste al arte?

Geandy Pavón: Hola Rainy, muchas gracias por esta oportunidad, por el interés en mi trabajo. Nací en Las Tunas, un pueblo en la carretera central del Oriente de Cuba, convertido en provincia en el 1976, después del triunfo de la revolución castrista. Llegué al arte por tradición de familia, en la casa en la que me crié vivía un tío que es pintor. Allí aprendí los elementos de esa profesión desde muy pequeño, entre el olor a óleo y aguarrás. Mi preparación temprana en el dibujo y la pintura hicieron un poco más fácil ganarme el derecho para estudiar artes plásticas en la escuela elemental de artes de la provincia y después en la Escuela Nacional de Artes, ENA, en la Habana.

LM: Tu formación inicial fue como artista plástico y luego te hiciste fotógrafo. Creo que todavía creas tu obra entre ambos medios. ¿Cómo manejas esa especie de desafío creativo? Me imagino que decidir de qué manera desarrollar un proyecto no debe ser nada fácil cuando tienes tantos recursos en tu haber.

GP: Llegué a la fotografía gracias a la pintura. Aprendí fotografía para documentar mi obra pictórica y eso me llevó a experimentar y a aventurarme a producir algunas imágenes como referencia para mi trabajo como pintor. En un inicio mi fotografía estuvo en función de mi pintura. Un día conocí al fotógrafo Juan Carlos Alom, para mí, uno de los artistas más versátiles y únicos que ha producido esa isla nuestra. Alom revisó algunos de mis experimentos y me insistió para que trabajara la fotografía de manera independiente, con un fin en sí misma. Así fue como produje mi primera serie, con una cámara Hasselblad analógica que conseguimos a buen precio. Un tiempo después Juan Carlos y yo instalamos un laboratorio en el sótano de un edificio de nuestro amigo Armando Álvarez, en West New York, New Jersey.

Mi objetivo último como creador es producir una imagen, pero esa imagen debe nacer y vivir cómodamente en su medio, en diálogo y armonía con su ser. Para mí las técnicas no son más que instrumentos, como el pincel o la cámara. Es cierto que aún pinto, aunque últimamente menos, las ideas que tengo ahora son más afines a la fotografía y al video que a la pintura. Pero eso pudiera cambiar en cualquier momento.

La forma que le das a tu pregunta es magnífica. Es cierto que el exceso de recursos no siempre hace más difícil la solución de un problema o la realización de una idea, sobre todo en el arte. Paradójico ¿no?

©Geandy Pavón

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Serie: 40 Days & 40 Nights - Geandy Pavón 


LM: Sigamos por el final… Tu serie Quarantine: 40 Days & 40 Nights se exhibe online en estos momentos en el Art Museum of The Americas ¿cómo surge la idea de hacerla y qué tipo de barreras sorteaste para llevarla a cabo? Con toda la parálisis social causada por el Covid-19 debió ser un reto.

GP: La idea de Quarantine: 40 Days & 40 Nights surge de una circunstancia muy particular. Me encontraba en la ciudad de Buffalo, New York, visitando a mi novia Imara López. Estando allí ocurrió la gran explosión de la pandemia en el área metropolitana de New York y New Jersey, donde resido y trabajo. Fue así como decidí quedarme en Búfalo y pasar la cuarentena sugerida por las autoridades del país. Llevaba conmigo una cámara digital, un flash y la inquietud de todo artista de no poder estar demasiado tiempo sin hacer arte. La serie comenzó sin pretender ser una serie. Las primeras fotos tienen un especial desenfado, fueron hechas usando la luz disponible y algo de flash para rellenar, pero poco a poco surgió la idea -y con ella la necesidad- de hacer una producción más complicada. Las dificultades no fueron pocas. No contaba con el equipo necesario. A 400 millas de mi estudio en New Jersey solo tenía conmigo una lente de 50 mm, una cámara y un flash. Súmale a eso la dificultad del momento: casi todos los comercios estaban cerrados debido a la pandemia. Fue así que se me ocurrió construir no solo los escenarios de las fotos, sino también los instrumentos para lograr producirlas. Con cartones, papel de aluminio y linternas construí cajas de luz, proyectores, etcétera. Mi trabajo como fotógrafo comercial me ayudó mucho, especialmente para saber qué necesitaba para lograr exactamente lo que quería. Digo esto porque, para mí, la gran escuela fotográfica está en la fotografía comercial. Los mejores fotógrafos desde el punto de vista técnico no suelen ser los artistas sino los fotógrafos comerciales. Al menos, esa es mi experiencia.

Desde el principio tuve claro que lo que no quería hacer era una documentación de ese tiempo en reclusión. Hubiera sido terriblemente aburrido documentar la rutina y el encierro. Cada día confabulábamos sobre un tema en específico y la mejor manera de convertirlo en una imagen.

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Serie: The Cuban Americans - Geandy Pavón 


LM: Una de las series que más me gusta es The Cuban-Americans, una especie de guiño fotográfico a la obra de Robert Frank y que nos muestra personas de origen cubano acá en Estados Unidos. ¿Me puedes hablar del proceso para desarrollar este proyecto?

GP: La serie The Cuban-Americans es efectivamente un guiño a Robert Frank y su imprescindible trabajo The Americans. Para llevarla a cabo utilicé película en blanco y negro (Kodak Tri-X de 400 y 800 ASA), la misma que utilizó Robert Frank. Me interesaba conseguir el descuido que él logró, el grano fotográfico, el contraste exagerado, etcétera. Pero también me interesaba acercarme a Frank conceptualmente. 

En The Americans, Robert Frank tuvo la osadía de mostrar una de las caras ocultas de los Estados Unidos. En medio del discurso triunfalista de post guerra de los años 50, Frank retrata a los negros, a la clase obrera y pobre; retrata la desigualdad social, los inmigrantes. Fue acusado de ser contrario a los valores nacionales, de antiamericano. Todo ese tipo de etiquetas que el chovinismo suele ponerle a la mirada crítica sobre este país y que, tristemente, sigue siendo tan frecuente, sobre todo en estos días. Yo también considero que los exiliados cubanos tenemos una visión triunfalista de nuestra condición de desterrados. Es muy raro porque nos movemos entre ese discurso triunfalista, con frecuencia arrogante, y nuestra condición de víctimas. Creo que eso afecta directamente la manera en que hemos contado nuestra historia. Por lo general nos quedamos sólo con la parte que cuenta el éxito, hablamos de nuestra tragedia cubana y de nuestros triunfos americanos. Pero siento que la realidad es otra, mucho más compleja y menos novelesca. La mayoría de los cubanos que he conocido aquí ni son gerentes de la Coca Cola ni legisladores del sur de Florida ni artistas famosos. Son gente de a pie, inmigrantes que viven como inmigrantes. La vida de esos cubanos famosos está híper documentada y contada. Yo quería retratar a la niña que vive en un basement de mi ghetto cubano en Union City, New Jersey. Yo quería retratar lo raro, lo indefinido, ese guión, esa tierra de nadie que se interpone entre la palabra “Cubans” y la palabra “Americans”, y que, como bien ha señalado el escritor Gustavo Pérez Firmat, lo mismo une que separa, tanto nominal como culturalmente.

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Retratos: Luis Posada Carriles - Geandy Pavón


LM: Te admiro mucho como artista y fotógrafo, pero también te admiro como ser humano y como cubano. Una de las cosas que más admiro de ti es que eres un tipo consecuente y firme de ideas. Mientras leía las palabras que acompañan las fotos de Luis Posada Carriles lo primero que haces es una declaración en la que admites: “Yo hubiera retratado a Fidel Castro. Entre más cerca mejor, con una lente macro, un retrato que grabara para siempre cada pelo de su barba, cada vaso sanguíneo de su rostro, ese rostro lejano y ubicuo por el que circuló la sangre de quien sometió a los míos, de quien hipnotizó a un pueblo y me forzó́ al exilio”. Eso no solo habla de tu carácter y tu integridad, si que demuestra una valentía enorme. ¿Me puedes hablar un poco de este proceso de retratar a una figura tan controversial como Posada Carriles?

GP: Retratar a Luis Posada Carriles fue un reto. No hay muchas buenas fotos de él, pero hay un retrato magnífico que hizo Delio Regueral, un fotógrafo cubano de Miami. La foto de Regueral muestra a un Posada desafiante, enseñando con orgullo sus cicatrices de guerrero. Siempre supe que si un día retrataba a Carriles ese no podía ser el camino. Ya ese retrato existe y es inmejorable. Mi foto de Posada Carriles es la de un guerrero cansado, vencido por el sueño. Mi retrato es el retrato del fin, la otra cara de esa imagen lograda por el Maestro Regueral. De ese día me quedo con otras dos versiones, un close-up a color del rostro de Carriles y un retrato de éste haciendo un gesto de “Ahí viene el Coco”. Posada actuando, encarnado en su propia caricatura. Creo que mi generación ha vivido a la sombra de hombres como Luis Posada Carriles y Fidel Castro, el estruendo de esa otra bronca generacional entre pistoleros y machos alfa nos anuló y enmudeció a los que vinimos después. Vale aclarar que el principal responsable de esa castración nacional no es Posada Carriles sino los que han gobernado nuestro país por más de seis décadas. Pero de la misma manera también sospecho que la libertad y la democracia nunca fueron prioridad de ninguna de las dos facciones.

Retrato de Teresa - Geandy Pavón


LM: Aquí voy con dos preguntas que no tienen relación, pero que no quiero olvidar: ¿Me puedes hablar un poco de Retrato de Teresa? ¿Qué sentiste al retratar a expresos políticos cubanos? Me imagino que debió ser una experiencia intensa y cargada de dolor.

GP: Retrato de Teresa es un video corto que tiene la misma energía y atmósfera de The Cuban-Americans. El video cuenta el drama de Teresa, una amiga exiliada que vive en uno de esos edificios para ancianos y sufre de una úlcera en su pierna, es una breve historia sobre el tiempo, el encierro y la libertad.

Yo creo que en el fondo todos los que trabajamos con imágenes, lo que realmente queremos es hacer una película. Retrato de Teresa es uno de esos ensayos.

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Serie: Vae Victis - Geandy Pavón


Cuando llegué al exilio en el año 1996, salí directamente del aeropuerto JFK rumbo a la Asociación de Expresos Políticos Cubanos en Union City. Guillermo Estévez, la persona que nos recogió al llegar a New York, es miembro de la Asociación y expreso político. Ese fue mi primer encuentro en grande con eso que se conoce como el Presidio Político Histórico. Estamos hablando de hombres que sufrieron condenas de entre 10 y 30 años, de gente que a pesar de todo lo vivido tenía un optimismo envidiable. Recuerdo que yo, con apenas 21 años, me sentía un anciano pesimista en comparación con ellos.

Pasó mucho tiempo y, sin embargo, nunca se me ocurrió hacer ningún proyecto que involucrara a los expresos políticos. Yo no era fotógrafo en aquel entonces. Años más tarde tuve el privilegio enorme de conocer y establecer una gran amistad con el poeta y expreso político Jorge Valls. Para mí Jorge era la encarnación de una Cuba que yo sospechaba moriría con él. Esa sospecha, ese miedo a perder un testimonio tan valioso y único, me abrió los ojos a una realidad que siempre había estado ahí y que yo no había sido capaz de ver. Comencé documentando a Jorge Valls, después me extendí a un proyecto más ambicioso: hacer un ensayo fotográfico sobre los expresos políticos.

El proceso para esta serie me tomó alrededor de dos años. Comencé a visitar el local de la Asociación cada martes, el día que los expresos se reúnen allí. Entendí inmediatamente que no sería un trabajo rápido ni mucho menos fácil. Primero tendría que entrar a ese mundo y entenderlo, ganarme la confianza de ellos, convencerlos de la importancia de un proyecto así.
El crítico de arte y ensayista Iván de la Nuez ha señalado muy bien cómo la revolución cubana, a diferencia de otras, se hizo retratar no en piedra sino en un soporte blando, en forma de documento fotográfico. No es lo mismo derribar un monumento -algo tan de moda en nuestros días- que destruir, quemar un documento. El derribo de una estatua puede ser liberador. La destrucción de un documento es un acto atado a una tradición más oscura: la quema de libros por los nazis o la inquisición, por sólo mencionar un par de ejemplos.

El gran relato de la revolución cubana es fotográfico; un relato fotográfico que cuenta el triunfo de los que vencieron. Yo quería contar esa otra parte de la historia usando ese mismo soporte, la fotografía. En gran medida esta serie es un intento de contar la misma historia, pero con esos pedazos de película descartados por la edición histórica de los que ganaron.

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Serie: Quo Vadis - Geandy Pavón 


LM: Estuviste también por Costa Rica documentando a los cubanos que se habían quedado varados ahí. Una serie impactante. ¿Te fue fácil el proceso al ser también cubano? ¿O lo dificultó el ser cubano y entender el dolor por el que pasaron los nuestros? Me pongo en tu lugar e imagino que las emociones se intensifican en un momento así.

GP: No es raro que el paraíso de un fotógrafo esté en ocasiones en medio de la desolación y la tragedia de mucha gente. Pero creo que el problema es mayor aún cuando esa gente es tu gente. En ese sentido fue muy difícil separarme emocionalmente de los sujetos que retrataba. Yo me fui a Costa Rica en época de Navidad y la pasé en un campo de refugiados, junto a los inmigrantes cubanos en el pueblo fronterizo de La Cruz, en la provincia de Guanacaste. La situación en la que estas personas se encontraban era realmente desgarradora. La gran mayoría habían hecho su travesía desde Ecuador, pasando por pueblos, la selva, el mar; a merced de los narcos, de los coyotes y de las guerrillas colombianas. Súmale a todo eso el hecho de estar en medio de una fecha como la Navidad. Esa fue la Navidad más verdadera y profunda de toda mi existencia, una Navidad verdaderamente cristiana en todos los sentidos posibles. Si me lo permites te voy a contestar mejor con un fragmento de mi diario de esos días, específicamente del día 24 de diciembre del 2015:


Hoy me fui temprano a la terminal de ómnibus de La Cruz para visitar el punto fronterizo conocido como Peñas Blancas. El viaje duró una media hora, al llegar vi que los cubanos habían tomado el portal de la terminal como refugio, han desarrollado toda una técnica para construir unas casas de campaña con pedazos de saco y plástico. 

El camino que llega hasta la misma línea de la frontera es de tierra fangosa y está a unos 400 metros de la terminal, había una línea de camiones desde la entrada hasta la frontera misma, también son muchos los nicaragüenses que viven en CR y que van a pasar la Navidad a Nicaragua, caminaban en fila india cargados de cosas para cruzar hacia su país.

Al llegar a la frontera comencé a retratar a los militares nicaragüenses que no estaban nada contentos con aquello, (se cuenta entre los cubanos que algunos de esos militares son Boina Rojas cubanos)

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Serie: Quo Vadis - Geandy Pavón


De regreso me encontré un cartel en la fachada de una casa aduanera que decía: “Bienvenidos los Cubanos”

Mientras tomaba una foto de aquello se me acercó un señor que me dijo que allí había cubanos, le pedí conocerlos y me condujo hasta el patio del lugar donde había unas familias cubanas. Los retraté y me tomé un café con ellos. Ya de regreso hacia la terminal y mientras tomaba fotos de algunos inmigrantes, uno de ellos me preguntó si conocía a “La guerrillera” 

La guerrillera es una niña de 2 meses, hija de un matrimonio muy joven de Guantánamo. Viven en aquel portal sobre cartones y comen de lo que la gente les regala. La Guerrillera nació en la frontera de Panamá. 

El resto de mi Navidad fue en el campamento La Cruz, cené allí con ellos yuca con carne de puerco. Todos me preguntan cómo es “La Yuma”. Yo no he podido dejar de pensar en “La Guerrillera” y sus padres, es la imagen más cercana y profunda de la Navidad que he tenido…

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Serie: Domestic - Geandy Pavón 


LM: Pongámonos técnicos. Yo, en particular, trato de desarrollar mi trabajo en formato analógico. Tengo razones específicas para eso. ¿Cómo trabaja Geandy? ¿Cómo escoges en qué formato desarrollar un proyecto? Y si lo haces con negativos, ¿cómo escoges que tipo de negativo usar y por qué?

GP: En esta parte me voy a poner un poco retro, o retrógrado. Para mí se puede decir con certeza que conoces la técnica fotográfica, cuando has pasado horas en un laboratorio revelando e imprimiendo tus propias fotos. A diferencia de la pintura, no hay fotógrafos naive, hay fotógrafos autodidactas, pero eso es otra cosa. Dicho esto, no tengo nada en contra de la fotografía digital, todo lo contrarío, la empleo constantemente. No soy un purista de la técnica ni nada por el estilo, simplemente considero que quien entiende la fotografía analógica, entiende aún mejor la digital.

Yo escojo el formato según la naturaleza del proyecto. Te pongo un ejemplo: Escogí negativos en blanco y negro de 35mm para la serie The Cuban-Americans, porque estaba buscando acercarme al trabajo hecho por Robert Frank en sus The Americans. De hecho utilicé el mismo tipo de película, la misma marca de rollo y luminosidad. Lo mismo te puedo decir de la serie sobre los expresos políticos (Vae Victis). Yo estaba dialogando con una tradición fotográfica, por eso me decidí por la fotografía analógica.

En otros casos, cuando lo que quiero es una resolución muy grande, he decidido usar la placa o formato grande. Un buen escaneo digital de un negativo de 8x10 humilla a la mayoría de las cámaras digitales de hoy día.

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Serie: Superheroes - Geandy Pavón


LM: Esta es la pregunta que más repito en estas entrevistas: ¿qué motiva a Geandy, que te inspira a diario y cuáles consideras tus mayores influencias?

GP: Creo que lo que más me motiva en la vida es descubrir que no soy eterno. Parece una tontería, pero no lo es. La gran mayoría de la gente suele vivir como si lo fueran. Tengo premura para documentar y trabajar en cosas que están a punto de desaparecer. Si tuviera que resumir y descubrir el eje central de toda mi obra, te diría que es justamente ese: la prisa por llegar y documentar algo justo antes de que deje de ser, el momento más bello y verdadero de toda existencia.

LM: ¿Qué planes futuros tienes? ¿Con qué nos piensas sorprender próximamente?

GP: Mis planes futuros son trabajar en un libro sobre mi última serie Quarantine: 40 Days & 40 Nights y reabrir mi laboratorio, cerrado después de la pandemia. Quiero comenzar a experimentar con wet-collodium, una vieja técnica fotográfica creada en 1851 por Frederick Scott Archer y que consiste en un soporte de cristal tratado con una emulsión de nitrato de plata.

Actualmente trabajo en una serie fotográfica (aún sin título) sobre la imagen religiosa.


LM: Gracias Geandy, ha sido un placer conversar contigo y conocer más de tu obra.  Bienvenido oficialmente a La Manigua. 


Miami-New York

Septiembre 23 del 2020

“Año de la Pandemia”


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Art Videos Sequences - Geandy Pavón                      (click to view)

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