Relatos del Silencio
El 2020 será recordado como el año de la pandemia. Esa que arrasó con mucho, destruyó hogares, separó familias, apagó amores. Desde principios del mes de marzo, la ciudad donde vivo entró en cuarentena. De pronto me vi lleno de planes truncados, alejado de mis hijos, distante. Caí en cuenta que la vida es muy frágil, se puede romper tan fácil como se rompe un vaso que se nos cae de las manos, que se va sin avisar, de pronto no estamos. La idea de no estar, de no abrazar golpeó mi rostro y casi me paraliza. La nostalgia del amor me recorrió el cuerpo como ese frío de las horas tempranas en que sales desabrigado. Se nos ha olvidado también convivir, disfrutarnos los unos a los otros, lo hemos cambiado todo por redes sociales, entregando nuestra libertad a cambio de los "me gusta" proporcionados por algoritmos computarizados. Vendida nuestra alma al diablo de la tecnología. ¿Qué dejamos atrás? ¿Qué será de ellos? ¿Di acaso todo lo que tenía que dar? Todo eso me pregunto, mientras camino sin rumbo planificado a las 6:30 de la mañana. Pasaron 30 días sin que pudiera abrazar. Viví la ansiedad de entrar en contacto con un enfermo del virus, forzado a hacerme la prueba. Esperar 10 largos días por los resultados. También perdí un amor. Estas fotografías empezaron como un ejercicio a la deriva durante recorridos matutinos, como un antídoto contra la ansiedad y la separación forzosa de mis seres queridos.
Relatos del Silencio nace de la necesidad de encontrar paz. En estas caminatas decidí tomar una pequeña cámara automática conmigo y empezar a fotografiar todo lo que me rodeaba en la zona donde vivo. Este andar en las primeras horas de la mañana me brindó la posibilidad de encontrarme prácticamente a solas con la naturaleza que me rodea. Esa que tanto escasea hoy en día. En esta época en que la inmediatez, la prisa, el desasosiego es factor predominante, descubrí momentos de paz y calma total. Poco a poco nacieron estas fotografías que a pesar de hacer referencia en cierta medida las pinturas "prerrafaelistas" que reflejaban la periferia de las ciudades mostrando su belleza de forma poética, son vigentes, y ponen al descubierto el descuido de la sociedad para preservar nuestro mundo. Es presente en la serie una huella del “pictorialismo” fotográfico que predominó hasta principios del siglo 20 que también refleja ese ideal de belleza, tonalidad y composición sin poner en riesgo mi mirada personal, más contemporánea. Todas las imágenes son realizadas en formato tradicional analógico, aprovechando las características particulares que confiere la película a color.
Rainy Silvestre
Mayo 1ro, 2020